Este sistema facilita la salida del coche cuando se encuentra detenido en pendiente y la inclinación favorece el movimiento en el sentido contrario de la marcha en cuanto se levanta el pie del freno.
¿En qué consiste?
Este sistema facilita la salida del coche cuando se encuentra detenido en pendiente y la inclinación favorece el movimiento en el sentido contrario de la marcha en cuanto se levanta el pie del freno.
¿Para qué sirve?
El arranque en pendiente es sin duda una de las maniobras de conducción más complicadas, y no únicamente para los conductores noveles. Por ejemplo, con una caja de cambios manual, la dificultad de arrancar en pendiente radica en hacer avanzar el coche sin que este retroceda. Para ello, el conductor debe de sincronizar con bastante habilidad los pedales del embrague y del acelerador, al mismo tiempo que el freno de mano o incluso el pedal del freno para los más intrépidos. La ayuda de arranque en pendiente automatiza toda esta operación.
¿Cuáles son los vehículos implicados?
Este sistema puede estar integrado en el freno de estacionamiento electrónico (ej: Renault Scenic), o bien incluido en el control de estabilidad ESC (ej: Smart o VW Passat), generalmente por menos de 70 €. Esta función es compatible tanto con las cajas de cambios manuales como automáticas. No se puede añadir después de la venta.
¿Cómo funciona?
El coche viene equipado con sensores suplementarios (embrague y pendiente). El conductor mete una marcha y suelta progresivamente el embrague a la vez que acelera. Cuando el par de las ruedas motrices se considera suficiente para contrarrestar el efecto de la pendiente, los frenos se sueltan automáticamente y el coche puede avanzar. El sistema funciona tanto en el sentido de la marcha, como marcha atrás. Si el coche viene equipado con un freno de estacionamiento electrónico, este no se desactiva hasta que el par del motor alcance las ruedas motrices. El otro sistema consiste simplemente en la presión ejercida sobre los frenos convencionales por parte del sistema ESC. El conductor debe antes apretar el pedal del freno y a veces un botón especifico. Cuando suelta el freno, la presión se sigue conservando durante un par de segundos, lo que deja el tiempo suficiente para sincronizar de forma correcta los pedales del acelerador y del freno. Pasado este tiempo, la sujeción se suprime para permitir que el coche avance en el sentido contrario de la pendiente.
Lo que hay que recordar.
Este sistema de ayuda de arranque en pendiente reviste especial interés en coches con caja de cambios manual, y en algunos casos puede recibir el nombre genérico anglosajón por parte de los fabricantes: Auto-Hold, Hill-Assist o HSA (Hill Start Assistant).
Las ventajas
+ Facilita una maniobra particularmente complicada
Los inconvenientes
- Esta función no viene de serie en todos los vehículos