Antes de finalizar la negociación, y durante la cita concertada con el vendedor, debe de tomarse el tiempo suficiente para asegurarse de que el vehículo ha tenido un buen mantenimiento por parte de su antiguo propietario. A continuación le indicamos los puntos clave que hay comprobar inicialmente.
El mantenimiento de un vehículo es de vital importancia para su periodo de vida útil y su propia seguridad. Es por ello que, durante la cita con el vendedor, pida consultar el libro de mantenimiento y también todas las facturas de las posibles reparaciones efectuadas. Si bien es cierto que el vehículo se beneficia de un correcto seguimiento mientras dura su garantía, una vez concluida esta, las facturas son la única prueba de las que dispone para determinar todo lo que haya podido ser modificado.
Los papeles en regla
Para ceder su vehículo, el vendedor deber de tener al día todos los trámites administrativos. Si el coche tiene más de 4 años, tiene que haber pasado la ITV en los últimos 6 meses. Es aconsejable pedir el primer informe técnico redactado por el mecánico, para así tener la lista de todos los defectos leves que no necesitaban una segunda visita a la concesión. Además, debe de aportarle un certificado de situación administrativa o Informe del vehículo para comprobar que no está embargado, así como el histórico de las reparaciones efectuadas en los últimos años (cambio de aceite, de filtros, etc…).
Comprobación de los niveles y los neumáticos
Para comprobar el mantenimiento de un vehículo, también puede revisar simplemente unos cuantos detalles, que le permitirán saber si el antiguo propietario lo mantuvo cuidado o no. Revise el nivel de los líquidos (de refrigeración, del limpiaparabrisas, aceite del motor, líquido de frenos).
Además, echar un vistazo a los neumáticos solo le costará unos segundos y le permitirá detectar posibles problemas del vehículo y su mantenimiento. La ley exige que la profundidad del dibujo no sea inferior a 1,6 mm para que el agua pueda drenar correctamente durante la conducción. Un desgaste irregular de la banda de rodamiento puede evidenciar un fallo en la alineación, equilibrio o simplemente de presión de los neumáticos.
Inspección de la carrocería
Inspeccione el coche desde todos los ángulos, la carrocería puede decir mucho sobre su estado real. Dé toda la vuelta para localizar rascones, golpes y posibles diferencias en la pintura. Dependiendo de la gravedad de los defectos, podrá entonces regatear el precio de venta con el vendedor y obtener algún descuento. Compruebe igualmente los bajos y el interior del vehículo levantando las alfombrillas para asegurarse que no existen filtraciones ni restos de óxido.